sábado, 31 de julio de 2010

LOPEZ OBRADOR ENARBOLA LAS BANDERAS DEL PUEBLO
En el Zócalo de la ciudad de México DF, el 25 de Julio pasado, se llevó a cabo uno más de los actos politicos encabezados por el presidente legítimo Andrés Manuel López Obrador. Por el hecho de considerar que el contenido de su discurso es de enorme interés para los 15 millones de mexicanos que votaron por su programa en el 2006 y siguen manteniendo la fe en su conductor, igual que para el resto de la población ubicada en otras trincheras les será de utilidad al menos para la crítica al Proyecto Alternativo de Nación que enarbola este singular mexicano, es que me sirvo compartir con ustedes esta pieza oratoria, que desde mi punto de vista, es una aportación a la continuidad de la experiencia histórica del país.
Así empieza su discurso: ´´Amigas y amigos, como en otras ocasiones, pero ahora con mayor entusiasmo porque estamos viviendo tiempos de importantes definiciones, nos volvemos a congregar aquí, en el Zócalo, en la principal plaza pública del país. En esta asamblea, como ha quedado demostrado, participan ciudadanos de diversos sectores, clases sociales, culturas y de todo el territorio nacional. Hombres y mujeres, humanistas que con tesón y con trabajo, han logrado construir una organización nacional para transformar a México.
Hoy, también se ha dado a conocer el Proyecto Alternativo de Nación, elaborado por un grupo de especialistas e intelectuales de inobjetable honestidad y comprometidos con las mejores causas del pueblo y de la patria. Con orgullo podemos decir que ya tenemos una organización nacional y un proyecto para renovar la vida pública de México.
En estos últimos cuatro años, entre todos hemos emprendido la lucha por la transformación del país, pero sobre todo hemos aprendido a conocer mejor la realidad nacional y hemos llegado a la conclusión de que los graves y grandes problemas del país, se han originado por el predominio de una minoría rapaz que se ha venido apoderando de todo, sin que le importe el sufrimiento del pueblo y el destino de la nación.
Este grupo de 30 potentados es el responsable de la actual tragedia nacional y del estallido de odio, resentimiento, inseguridad y violencia que padecemos. Por su ambición desmedida, han provocado la ruina en las actividades productivas del campo y la ciudad, han obligado a los mexicanos a buscarse la vida en la economía informal, nos han convertido en el país que más mano de obra exporta al extranjero, han llevado a la pobreza y a la desesperación a millones de mexicanos, han cancelado el futuro de los jóvenes y a muchos los han empujado a tomar el camino de las conductas antisociales.
Otra consecuencia de la política antipopular y excluyente que sólo beneficia a los de arriba, es el hecho de que en los últimos tiempos, alrededor de 50 mil familias de clases medias y altas, sobre todo en los estados del norte, se han visto en la necesidad de irse a vivir a Estados Unidos ante la inseguridad y violencia que, lamentablemente, prevalece en casi todo el territorio nacional.
Para revertir esta decadencia y dar nueva viabilidad a la nación, no hay más remedio que llevar a cabo una renovación tajante en todos los órdenes de la vida pública. Y como es obvio, y lo hemos entendido muy bien todos los que estamos aquí y muchos otros, el cambio que se necesita no será promovido por las élites en el poder, sino tendrá que venir desde abajo y con la gente, porque en las actuales circunstancias sólo el pueblo puede salvar al pueblo, sólo el pueblo organizado puede salvar a la nación. La única salida que existe es derrotar a la oligarquía en el terreno político y de manera pacífica, para establecer una auténtica democracia, un gobierno del pueblo y para el pueblo. En eso estamos empeñados millones de mexicanos. Esa es la razón de nuestro movimiento.
Además, tenemos claro lo que se tiene que hacer para llevar a cabo la transformación del país. Una vez más, damos a conocer las decisiones que se tomarán y lo que haremos al triunfo de nuestro movimiento para lograr el renacimiento de México. En primer lugar, rescataremos a las instituciones y las pondremos al servicio del pueblo y de la nación. El Estado mexicano dejará de ser un simple comité al servicio de una minoría y habrá una nueva legalidad.
Actualmente, la justicia, como lo denunció Francisco I. Madero en la época porfirista, ´´en vez de impartir su protección al débil, sólo sirve para legalizar los despojos que comete el fuerte´´. No hay realmente un Estado de Derecho, es un estado de chueco. Los ministros de la Corte están al servicio de la mafia en el poder; casi todos ellos le deben su cargo a Salinas, a Fox, a Felipe Calderón o a Manlio Fabio Beltrones.
Esto tan solo explica su proceder en casos como el del incendio de la guardería ABC de Hermosillo, donde perdieron la vida 49 bebés, y se otorgó impunidad a los responsables; o en la resolución en contra de los trabajadores electricistas; o en la decisión de disminuir las pensiones de los jubilados; o en el hecho de hacerse de la vista gorda en las violaciones constitucionales para permitir la privatización de la industria eléctrica y del petróleo. Tal pareciera que estos jueces de consigna, siempre están prestos a escuchar en qué sentido quieren las resoluciones los potentados, para nada más encargarse de construir la justificación jurídica.
Por eso, para que se imparta justicia en beneficio del pueblo, promoveremos una reforma constitucional para elegir democráticamente a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Así era en la época de la República restaurada, así lo establecía la Constitución de 1857, para que las cosas marchen en el país, para que realmente haya legalidad, se tiene que lograr la independencia absoluta del Poder Judicial. Tenemos que convertir a la Suprema Corte en el faro de la ley.
También se democratizarán los medios de comunicación. Habrá competencia y se garantizará el derecho a la información. Es inaceptable que la televisión, la radio y la mayoría de los periódicos se concentren en unas cuantas manos y en vez de informar con amplitud, veracidad y profesionalismo, se utilicen como instrumentos para controlar y manipular al pueblo, y para proteger privilegios y hacer negocios al amparo del poder público.
Es una desfachatez que Televisa y Telefónica, empresa española de telecomunicaciones dirigida por Francisco Gil Díaz, quien fuera secretario de Hacienda de Fox, se estén quedando con la fibra óptica de la industria eléctrica nacional. ES decir, que hayan obtenido la concesión, por 20 años, de 21 mil kilómetros de fibra óptica, a cambio de 850 millones de pesos, cuando esa infraestructura se construyó con presupuesto público y costó 30 mil millones de pesos. También por influyentismo se les está entregando el espectro electromagnético para nuevos canales de radio y televisión. Siguen concentrando en unas cuantas manos todos los medios de comunicación.
Se recuperarán las riquezas y los bienes públicos que han sido concesionados ilegalmente, a través de acuerdos, reglamentos o leyes secundarias que, en ningún caso, pueden estar por encima del principio constitucional que señala el dominio directo de la nación sobre los recursos naturales del país. Este procedimiento, al llegar al Gobierno, lo vamos a aplicar en los casos de minería, la industria eléctrica y el petróleo.
Acabaremos con la corrupción imperante. Habrá un gobierno honesto y austero. Se reducirán a la mitad los sueldos de los altos funcionarios públicos y se terminarán el derroche y los privilegios de la alta burocracia.
En materia económica todos los esfuerzos se orientarán a impulsar la actividad productiva y la creación de empleos. Se rescatará al campo del abandono; se producirán en México los alimentos para dejar de importar lo que consumimos.
Se construirán –como aquí se dijo- tres grandes refinerías. Se cumplirá el objetivo de no vender un solo barril de petróleo crudo al extranjero para procesar aquí la materia prima y elaborar gasolinas y los productos petroquímicos. El sector energético será palanca del desarrollo nacional para crear empleos e industrializar al país, reduciendo el precio de las gasolinas, el diesel, el gas y la luz.
Se apoyará a las pequeñas y medianas empresas, industriales y comerciales, se apoyará a esas pequeñas y medianas empresas porque son las que más mano de obra generan. Se protegerán los recursos naturales; no se permitirán los monopolios; se promoverá una reforma fiscal progresiva, orientada no a aumentar impuestos ni a crear nuevos, sino a terminar con los privilegios fiscales de que gozan los potentados del país.
Por ejemplo, se terminará con el llamado régimen de consolidación fiscal que en la práctica exenta a las grandes corporaciones. Como aquí se dijo también, se cobrarán impuestos por las operaciones en la Bolsa y por la extracción de minerales. Aquí aprovecho para dar a conocer que, recientemente, los dos hombres más ricos de Estados Unidos, Bill Gates y Warren Buffet, están convocando a sus homólogos a destinar el 50 por ciento de sus fortunas a la filantropía. Inclusive, Buffet, que posee 45 mil millones de dólares, ha declarado que donará el 99 por ciento de su riqueza para acciones de caridad porque, según sus propias palabras, él y su familia podrían vivir con felicidad el resto de sus vidas, con el uno por ciento de lo que posee.
Así mismo, un grupo de 51 millonarios y multimillonarios alemanes acaba de dar a conocer que aportará 10 por ciento de sus fortunas, como impuesto a la riqueza, para que el gobierno de ese país cuente con más recursos y pueda atender las demandas sociales de los alemanes. Nosotros no le pediremos a los multimillonarios de México que donen parte de sus fortunas, sino simple y llanamente que paguen impuestos en la misma proporción que lo hacen sus pares en otros países, con lo cual se obtendrían alrededor de 300 mil millones de pesos. Este monto, junto con un ahorro de 200 mil millones de pesos por la aplicación de una política de austeridad republicana, nos permitiría tener recursos suficientes para reactivar la economía, generar empleos y garantizar el bienestar del pueblo.
Un objetivo fundamental del nuevo gobierno democrático, será establecer el Estado de bienestar; es decir, habrá pensión universal para todos los adultos mayores y para personas con discapacidad. Se otorgará atención médica y medicamentos gratuitos a toda la población, se va a garantizar lo que establece la Constitución, pero que hasta ahora es letra muerta, vamos a garantizar el derecho del pueblo a la salud.
Ningún joven será rechazado en escuelas preparatorias ni en universidades públicas; habrá becas para estudiantes de escasos recursos económicos; y se llevará a cabo un importante programa de mejoramiento, ampliación y construcción de vivienda.
Abro un paréntesis para aclarar, una vez más, que no estamos en contra de la iniciativa privada ni de los verdaderos empresarios. En el nuevo gobierno democrático se garantizarán las libertades y cada quien podrá dedicarse a la actividad que más le satisfaga y convenga. Pero, es obvio, todos tendremos que ceñirnos a la nueva legalidad y a reglas claras; se podrá hacer negocios pero no habrá influyentismo, corrupción ni impunidad; el presupuesto será realmente público; se le dará preferencia a los pobres; se cuidarán los recursos naturales; la riqueza de la nación y los frutos del trabajo de los mexicanos se distribuirán con justicia; pagarán más impuestos quienes más tienen. Y nunca más se permitirá que los privilegios de pocos se sustenten en la opresión y la miseria de muchos.´´ Hasta aquí llega la primera parte del discurso de AMLO en el Zócalo capitalino, de la asamblea informativa del 25 de julio. Sea usted partidario o no, es importante la lectura de este documento para que tenga elementos a la mano para que pueda compararlo con pronunciamientos de otros aspirantes a dirigir el destino de México.

sábado, 24 de julio de 2010

VIENE AHORA EL CAMBIO DE MAYORDOMO
LA RENUNCIA DE CALDERON YA TIENE FECHA
Los recientes cambios en el gabinete presidencial, entre ellos el relevo en la Secretaría de Gobernación, con Francisco Blake Mora como titular, han sido como siempre artilugios teatrales que persiguen el propósito de ganar tiempo, maquillar la preocupante realidad, y desviar la atención del pueblo en los verdaderos problemas que afronta el país. Sin embargo, tal parece que tales cambios fueron los últimos que hizo el actual inquilino de los Pinos, pues para las fuerzas doctrinarias del PAN que detentan el poder el tiempo de los cambios de funcionarios de gabinete se agotó, esa etapa ha terminado, los dueños de la renta nacional y autores del fraude electoral de 2006 agotaron su paciencia, viene ahora la exigencia del cambio del titular del Poder Ejecutivo, la renuncia de Felipe Calderón a su calidad de mayordomo en jefe de los intereses oligárquicos ya tiene fecha.
Toda crisis económica también es política, no puede darse una sin la otra. La trágica realidad material que sacude a nuestro pueblo esta imprimiendo su huella indeleble sobre las clases directoras. México está a punto de ebullición, vivimos una etapa de convulsión económica y por lo tanto política, tiempos de choques inevitables entre las contradicciones sociales insolutas.
La falta de poder adquisitivo de la clase trabajadora da como resultado inevitable el achicamiento del mercado interno y el consecuente cierre de fábricas ante la escasa demanda de bienes y servicios, generándose a la vez el desempleo. Esa política mendaz y depredadora del neoliberalismo es la causante de la concentración de la riqueza y la desigualdad social, polos opuestos que producen la irritación de la sociedad, desencadenando uno a uno los problemas de la descomposición social.
Son razones económicas las causantes de la polarización social y política; son razones económicas las que generan la violencia delictiva en la sociedad. En la realidad actual la política no puede unir lo que la economía divide, primero hay que arreglar la economía; lo que subyace en lo profundo de la injusta estructura económica es la abierta confrontación entre las distintas formas de la apropiación de la riqueza. Una minoría rapaz se roba la mayor parte de la riqueza del país por medios ´´legales´´, empujando al pueblo al camino de la ilegalidad y la justicia por propia mano como medios para obtener los bienes materiales indispensables para la subsistencia. La criminal política salarial del régimen empobrecedor no puede conducir a las masas explotadas a un paraíso de paz y tranquilidad.
Sin contar con la estadística del universo de los delitos, se alega desde los Pinos que las 26 mil ejecuciones que han teñido de rojo la geografía nacional durante el sexenio calderonista es producto del narcotráfico y la rivalidad entre esas bandas delictivas, queriendo sostener que si se elimina ese tipo de delincuencia organizada nuestro país se convertiría en automático en el paraíso de la democracia y la paz social, lo que es absolutamente falso, porque la violencia en todas sus formas arropa a la sociedad en su conjunto. Con un ejemplo ilustrador se desmiente por completo a Felipe Calderón y sus funcionarios: Estados Unidos es el mayor comercializador y consumidor de drogas en el mundo, y sin embargo no es el país que sufre los mayores índices de violencia entre su población.
Ante ese estado de cosas, las élites oligárquicas, dueñas de la renta nacional y del poder político, están más asustadas que nunca por el monstruo ingobernable que han hecho de nuestro pueblo por la aplicación de sus políticas fallidas. El pánico se apoderó de las clases adineradas al no sentirse seguras de sus fortunas ni de la retención del poder, como el brujo que ha desencadenado con sus conjuros las fuerzas infernales, y éstas ya fuera de control amenazan con destruir al mismo que las creó.
Decididas a tomar cartas en el asunto, las fuerzas oligárquicas han estado observando con lupa el desfile de cambios entre los funcionarios del gabinete calderonista y cómo éstos no han resuelto ningún problema, están convencidas que no son los integrantes del gabinete los que fallan sino el que los preside, de tal suerte que han decidido cambiar de mayordomo a más tardar el 31 de diciembre del presente año. El fin que se persigue es acomodar un sustituto en los Pinos que pueda lograr estabilizar la alarmante situación del país antes del proceso electoral que definirá la sucesión presidencial. La estrategia demanda otra carta al frente del Poder Ejecutivo porque saben que si Calderón y su terquedad continúan hasta terminar el sexenio la derrota en los comicios presidenciales está garantizada. El candidato del PAN estaría derrotado automáticamente, y difícilmente el pueblo se tragaría el otro anzuelo de la ´´alternancia´´ con un candidato del PRI; las élites adineradas saben que de seguir las cosas por el mismo rumbo del desastre sus intereses sufrirían una aplastante derrota con cualquiera de los platillos que le presente al pueblo.
Recordemos que la llegada de Calderón a los Pinos no fue gratuita sino severamente condicionada por el comité de vendepatrias que lo impuso mediante el fraude electoral y lo instaló en el poder. Un presidente espurio que llegó lógicamente amarrado de las manos, con la encomienda de portar la estafeta de mayordomo en jefe a sueldo de los intereses oligárquicos.
El caso es que tales élites no han cosechado todo lo que programaron obtener durante la administración calderonista, y saben que todavía menos cosecharán si el poder se les va de las manos en la siguiente sucesión presidencial. Las gritadas ´´reformas estructurales que el país necesita´´, como ellos las definen, ya no llegarán en este sexenio. La fiscal, la laboral y la energética de segunda generación, la que abra de par en par la inversión privada en Pemex, tan esperada por el capital financiero, ya quedaron olvidadas por los actores políticos por el calentamiento del proceso sucesorio de 2012. Calderón les ha fallado, hay suficientes motivos para que los que lo sentaron en el poder lo depongan. La renuncia en los próximos meses del que gana como titular del Poder Ejecutivo no será lograda por la Presidencia Legítima de López Obrador, ni producto de la presión de las fuerzas progresistas del país, sino de las élites oligárquicas y financieras que lo instalaron en el poder.
Calderón se ha quedado sólo con el apoyo del grupo doctrinario y la ultraderecha cupular del PAN, las fuerzas del capital ya le retiraron su confianza. Es aquí donde debemos valorar las diferencias que existen al interior del conjunto de fuerzas retardatarias que se apropiaron de la conducción del país; entre ellas también conflictos de intereses, no son homogéneas. Digamos que hay dos grupos claramente diferenciados: el primero es el que integra la oligarquía pragmática, representante del capital monopolista y financiero, aliada de los intereses extranacionales, su única ideología es el dinero, no les importa quién esté en Los Pinos sino que sirva a sus intereses; el segundo grupo está compuesto por el panismo doctrinario, ultraconservador y clerical, distinguiéndose siempre por su mochería y a la vez por su labor al servicio de las clases poseedoras, éste sector esta interesado en mantenerse en el poder a como de lugar. La pugna que ha hecho crisis entre estos dos sectores que asaltaron el poder en santa alianza está por resolverse a favor de la oligarquía pragmática.
Para desentrañar el plan en marcha sólo hay que observar los acontecimientos que se suceden uno tras otro y descubriremos que llevan la misma dirección y el mismo propósito. Los monopolios mediáticos al servicio de la oligarquía pragmática han fabricado ya a Enrique Peña Nieto para que sea el próximo candidato presidencial del PRI, ese plan considera la necesidad de arrebatarle la silla al PAN para sentar a un priísta en su lugar y lograr una supuesta ´´alternancia´´ entre el mismo PRIANato. Ya hemos dicho que para los dueños de la renta nacional no importa cual partido ocupe el poder sino que sirva a sus intereses, y el PRI es el partido gemelo que les ha guardado lealtad mediante la llamada ´´oposición responsable´´.
La ejecución completa del plan pasa inevitablemente por la renuncia de Felipe Calderón, dejando en la silla como sustituto a un personaje que se preste a la maniobra, éste es Manlio Fabio Beltrones, Senador neoliberal y pieza clave en la legitimación calderonista, el primero de diciembre de 2006. El renunciante y el sustituto, se sabe de buena fuente, ya han sostenido con este propósito múltiples reuniones secretas. El priísta sonorense será el encargado de instrumentar el proceso de la llamada ´´alternancia´´ y entregarle el mando al otro priísta, Enrique Peña Nieto, al que visualizan vencedor en 2012. Ese es el plan.
Será esto posible, se preguntaran algunos, claro que lo es. Recordemos que la oligarquía pragmática es capaz de cambiar todo con el fin de que nada cambie, intentarán todo con el fin de garantizar la permanencia del estatus de privilegios vigente. Esa es la estrategia que los mantendrá ocupados hasta la conclusión de la sucesión presidencial.
Sin embargo cabe preguntarse, qué gana el pueblo con la renuncia anticipada de Calderón, y la respuesta es nada, en lo absoluto. Lo que hemos afirmado en estas líneas es la estrategia de la oligarquía para preservarse en el poder, nada cambia si se va Calderón y lo sustituye Manlio Fabio, es una medida que responde únicamente a ganar tiempo; mientras no cambie la actual correlación de las fuerzas políticas en el poder nada cambiará, ni con Peña Nieto ni con nadie que surja del PRIAN.
La estrategia del pueblo para arrebatarle el poder a la tiranía neoliberal es otra muy distinta; no se necesita ganar el aplauso de los grandes detentadores del capital sino ganar la conciencia de las grandes masas explotadas. Cuando esto último se logre el pueblo podrá reencontrarse con la victoria y marchar por el camino de su porvenir.

sábado, 17 de julio de 2010

CXVI ANIVERSARIO DE VICENTE LOMBARDO TOLEDANO
En el siglo XXI, a 116 años de su natalicio (16 de julio 1894-16 de Julio de 2010), Vicente Lombardo Toledano sigue presidiendo las luchas del pueblo mexicano. En el devenir de la humanidad hay seres afortunados por la historia. Nacen y se desarrollan en momentos de grandes transformaciones sociales. Si se hiciera un repaso de la vida de las personalidades que han influido en la marcha progresiva del género humano, nos encontraríamos con que los más grandes hombres han aparecido cuando una etapa está muriendo para dejar el paso a otra más avanzada; o cuando ya se está construyendo un nuevo estadio de la sociedad. La historia da a luz a sus hijos más preclaros cuando se conmociona con los saltos de más largas dimensiones.
La sociedad siempre engendra a sus conductores y los alumbra cuando tiene más necesidad de ellos. Por eso mismo, el advenimiento de los hombres superiores está sujeto a leyes objetivas. La correlación entre causalidad y casualidad han determinado siempre el carácter de los grandes guías de nuestra historia, de los cuales, los más destacados se han dado durante la Independencia, la Reforma, la Revolución de 1910 y el período constructivo de ésta que corre de 1917 a 1982.
Los años de formación de Vicente Lombardo Toledano corren de la aurora del siglo XX hasta la victoria del movimiento revolucionario. Pero como lo dijo varias veces: ´´comenzó a pensar en su patria el día en que estalló la Revolución´´. Por eso se ha dicho con razón que Lombardo es hijo genuino de la Revolución Mexicana. No pudo ir a los campos de batalla porque no tenía la edad para ello, pero el estallido social lo hizo meditar en México y lo empujó a dar sus primeros pasos por los senderos escabrosos de la lucha, hasta convertirse en el militante y teórico más acabado de ese proceso social que sacudió a nuestro país. Su obra es la síntesis de todo el proceso revolucionario mexicano, desde Miguel Hidalgo hasta Lázaro Cárdenas y las décadas posteriores hasta su desaparición física en 1968, analizado a la luz de la doctrina científica del marxismo-leninismo y la experiencia histórica universal.
Es imposible entender cualquier personalidad fuera de su contexto histórico. Dos vertientes confluyen a forjar a un hombre: la realidad material –socioeconómica- y las ideas que ella produce. Por eso es indispensable comprender la estructura social y sus transformaciones fundamentales, así como las corrientes del pensamiento de mayor influencia, para poder ubicar a un personaje de la historia y entender sus características más sobresalientes.
Gran parte de los años formativos de Vicente Lombardo Toledano corresponden a la etapa del llamado Porfiriato. El mismo hizo la caracterización esencial de este régimen. “La estructura económica y social de México era el latifundismo. El uno por ciento de la población era propietaria del 95 por ciento del territorio nacional. A los pequeños propietarios correspondía el dos por ciento de la propiedad rústica y a los pueblos y comunidades sólo uno por ciento, a pesar de que estos tres sectores de la sociedad constituían el 96 por ciento de la población dedicada a la agricultura”.
Las relaciones de producción en el campo tenían peculiaridades feudales y esclavistas. La servidumbre a que se sometía el campesinado tenía su reflejo en el peonaje. México era una colonia económica de las grandes potencias imperialistas. El 50 por ciento aproximadamente de la riqueza nacional estaba en manos de los monopolios norteamericanos. La clase obrera carecía de todo derecho; el país estaba muy lejos de poseer una legislación especial que rigiera las relaciones obrero-patronales, las cuales en esta época estaban sujetas a las leyes civiles. La huelga estaba considerada como un delito en contra de la libertad de industria y comercio, según lo estipulaba el Código Penal en vigor.
Una férrea dictadura sometía al pueblo mexicano. Cualquier crítica al sistema era castigada con la cárcel o con la muerte. El derecho del pueblo a elegir a sus gobernantes –base fundamental de la democracia formal- estaba ausente del panorama político de México. Había un abismo entre las clases sociales. Como en la época de la Colonia, se daba la diferencia entre los que todo tenían y los que nada poseían.

En consecuencia, tres objetivos fundamentales tenía que perseguir la Revolución Mexicana: la liberación del país respecto del dominio económico del extranjero; la destrucción del latifundismo, con supervivencia feudal-esclavista, y el establecimiento de un régimen democrático. Por tanto, fue una revolución antiimperialista, antifeudal y democrática. Esos fueron los principales aspectos de la realidad material que forjaron la personalidad de Vicente Lombardo Toledano y sus ideales emancipadores. Fue un hombre de la Revolución Mexicana, porque ella le hizo entender el drama de nuestro pueblo, le abrió los horizontes para afiliarse al pueblo trabajador y le mostró la vía que tenía el pueblo de México para seguir avanzando en el sentido de la independencia nacional y el progreso social.
Múltiples facetas abarcan la personalidad excepcional de Lombardo como militante, como teórico y hombre de cultura; de los cuales podríamos destacar por lo menos los siguientes: Se le reconoce su lucha para que el país tuviera una legislación del trabajo de carácter federal. Sus tesis fundamentales al respecto, fueron expuestos en la Convención Obrero-patronal, reunida en noviembre y diciembre de 1928, para discutir un proyecto de Código Federal del Trabajo, presentado por Emilio Portes Gil, Secretario de Gobernación en el Gabinete del Presidente Plutarco Elías Calles.
La CTM bajo su liderazgo, llevó a cabo una obra revolucionaria sin paralelo en la historia de México. Unificó por primera vez a todas las corrientes sindicales del país, contribuyó a la unidad del proletariado de América Latina, aplicó con agilidad y eficacia la línea estratégica y táctica de la alianza de la clase obrera con los campesinos y sectores democráticos, con el fin de conseguir objetivos comunes, ligando siempre las reivindicaciones inmediatas de la clase trabajadora con la batalla por la independencia económica de la nación.
El movimiento obrero mexicano, conducido por Vicente Lombardo Toledano, al llevar al terreno de la práctica la línea de la unidad de las fuerzas democráticas y antiimperialistas, dio impulso a la obra patriótica del Presidente Lázaro Cárdenas, hasta lograr la expropiación de la industria petrolera, objetivo largamente planteado por el dirigente obrero. Su destacado liderazgo en la organización y conducción del proletariado internacional es irrebatible; desde la CTM se convocó en septiembre de 1938 al Congreso Obrero Latinoamericano, del que surgió la central que tuvo mayor influencia en los pueblos del subcontinente: la Confederación de Trabajadores de América Latina –CTAL- que quedó bajo la presidencia del propio Lombardo.
En el ámbito del movimiento obrero mundial, no es menor la aportación del ilustre poblano. Desde la prestigiada tribuna de la CTAL, Lombardo se vinculó con el movimiento obrero de todos los continentes hasta lograr que estos esfuerzos culminaran en los Congresos Obreros de Londres y Paris, en 1945, que crearon la Federación Sindical Mundial, de la que el fundador de la CTM fue vicepresidente hasta 1963
Lombardo puso su vida al servicio de sus ideas e ideales, inspirados en las propias proclamas y rebeldías del pueblo mexicano. Fue militante, fundador y conductor de partidos políticos y funcionario público. Perteneció al Partido Laborista Mexicano, al Partido de la Revolución Mexicana y al Partido Popular, transformado en Partido Popular Socialista en 1960. Como funcionario público, fue Regidor del Ayuntamiento de la Ciudad de México, Oficial Mayor del Gobierno del DF y Gobernador interino de Puebla, entre otros. Como parlamentario participó en las legislaturas XXXI y XXXII del Congreso de la Unión.
Como educador, destacando solo algunos cargos, fue Secretario de la Universidad Popular Mexicana; de la Escuela Nacional Preparatoria en dos ocasiones; de la Preparatoria Nocturna. Fue fundador y director de la Escuela Preparatoria Gabino Barreda y de la Universidad Obrera de México. Maestro de la Escuela Nacional Preparatoria, de la Facultad de Jurisprudencia y de la de Comercio y Administración. Su amplia cultura y preparación como Licenciado en Derecho, Profesor Académico y Doctor en Filosofía, junto a sus ideales y obra escrita llenan alrededor de cien volúmenes, sin haber recopilado su trabajo en el extranjero.
Su ideal socialista jamás se apagó. Pero el socialismo que concebía para nuestro país debía tener los colores del paisaje de México y las vibraciones de la historia del pueblo. Debía estar enraizado en el ser nacional. Debía seguir la vía trazada por la Revolución Mexicana, a través de la democracia nacional y de la democracia del pueblo.
En la XLVI Legislatura del Congreso de la Unión, Vicente Lombardo Toledano ocupó un lugar de honor como Diputado del Partido que él fundó y dirigió hasta su muerte. Algunas de sus iniciativas forman parte de la vida parlamentaria y de las instituciones del país. Otras han sido recogidas en parte. Otra más, como la carrera parlamentaria y la reelección de diputados hoy es una bandera que ha hecho suya la derecha. Y sin duda una de las más importantes, como la relativa a un nuevo capítulo en la Constitución sobre la economía nacional, merecen nuevos estudios desde las actuales perspectivas de la nación. Quienes hoy se esfuerzan por rescatar el patrimonio cultural y la vida democrática de la capital del país con la creación del estado de Anáhuac, encontrarán en las iniciativas del maestro Lombardo Toledano valiosos puntos de vista que pueden ser considerados como fundamentos de un trabajo de largos alcances.
En el acto de homenaje que le rindieron sus amigos, discípulos, compañeros de lucha y personalidades del campo democrático en el Palacio de Bellas Artes, al cumplir sus 70 años de vida, reafirmó sus convicciones y su destino al lado de los trabajadores: “La vida me ha demostrado –expresó- que sin principios firmes derivados de una doctrina filosófica válida acerca del universo, del mundo y del hombre, lo mismo en la dirección del Estado que en la lucha política, no es posible una obra perdurable y fructífera. Transigir con los principios equivale al suicidio, hasta que no queda del que prevarica el recuerdo triste de un vencido que en vano proclama su victoria (…)
“La vida me ha enseñado que la decisión de servir va aparejada a la humildad, porque la vanidad y la soberbia no son sino la máscara que oculta incapacidad o una culpa que no quiere confesarse. La significación de la vida individual depende del grado de cooperación que se haya dado en la teoría y en la práctica a la conquista de las metas que la humanidad persigue…Desde que era estudiante no he sido sino eso: un soldado del ejército invencible de la clase trabajadora que todo lo produce, todo lo descubre y todo lo crea con sus manos y con su cerebro, lo mismo en las minas que en las fábricas, en las escuelas, en los laboratorios de investigación y en el interior de la conciencia. A ese ejército pertenece el porvenir, y si yo luché durante muchos años en el pasado, fue para llegar al presente, y si hoy lucho con pasión es para llegar al futuro. Por lo que a mí toca, seguiré la senda hasta el último momento de mi vida”.
En la noche del 16 de noviembre de 1968, la radio y la televisión transmitieron la noticia de la muerte de Vicente Lombardo Toledano. El PPS envió un mensaje a todos los partidos de la clase obrera del mundo para informarles que su conductor había dejado de existir. El Presidente Díaz Ordáz con todo su gabinete rindió homenaje al ilustre poblano. Lázaro Cárdenas hizo guardia ante el féretro, así como otras personalidades de la política, de la ciencia y la cultura. Una multitud lo acompañó a su última morada, en el panteón Jardín de la Ciudad de México (…desde 1994, en la celebración del Centenario de su Natalicio, sus restos fueron trasladados a la Rotonda de los Hombres Ilustres). Para despedirlo hicieron uso de la palabra: un representante de la Federación Sindical Mundial; el pintor David Alfaro Sequeiros; el representante de la Central Única de Trabajadores de Chile, Salvador Ocampo, y Jorge Cruickshank García, en nombre del Partido Popular Socialista.
En el año de 1994, en la celebración del primer centenario del natalicio del maestro Lombardo, las fuerzas políticas de México le rindieron un merecido homenaje en la Cámara de Diputados, y acordaron instalar su nombre en letras de oro en los muros de honor del Salón de Sesiones, junto a los próceres que forjaron la patria. Ahí está su nombre, vigilante, desde entonces, ocupando el sitial de honor más importante al que puede aspirar un hombre de excepción. Desde ahí, donde se dan las más grandes batallas para decidir el rumbo de México, Vicente Lombardo Toledano seguirá presidiendo las luchas del pueblo mexicano.
CXVI ANIVERSARIO DE VICENTE LOMBARDO TOLEDANO
En el siglo XXI, a 116 años de su natalicio (16 de julio 1894-16 de Julio de 2010), Vicente Lombardo Toledano sigue presidiendo las luchas del pueblo mexicano. En el devenir de la humanidad hay seres afortunados por la historia. Nacen y se desarrollan en momentos de grandes transformaciones sociales. Si se hiciera un repaso de la vida de las personalidades que han influido en la marcha progresiva del género humano, nos encontraríamos con que los más grandes hombres han aparecido cuando una etapa está muriendo para dejar el paso a otra más avanzada; o cuando ya se está construyendo un nuevo estadio de la sociedad. La historia da a luz a sus hijos más preclaros cuando se conmociona con los saltos de más largas dimensiones.
La sociedad siempre engendra a sus conductores y los alumbra cuando tiene más necesidad de ellos. Por eso mismo, el advenimiento de los hombres superiores está sujeto a leyes objetivas. La correlación entre causalidad y casualidad han determinado siempre el carácter de los grandes guías de nuestra historia, de los cuales, los más destacados se han dado durante la Independencia, la Reforma, la Revolución de 1910 y el período constructivo de ésta que corre de 1917 a 1982.
Los años de formación de Vicente Lombardo Toledano corren de la aurora del siglo XX hasta la victoria del movimiento revolucionario. Pero como lo dijo varias veces: ´´comenzó a pensar en su patria el día en que estalló la Revolución´´. Por eso se ha dicho con razón que Lombardo es hijo genuino de la Revolución Mexicana. No pudo ir a los campos de batalla porque no tenía la edad para ello, pero el estallido social lo hizo meditar en México y lo empujó a dar sus primeros pasos por los senderos escabrosos de la lucha, hasta convertirse en el militante y teórico más acabado de ese proceso social que sacudió a nuestro país. Su obra es la síntesis de todo el proceso revolucionario mexicano, desde Miguel Hidalgo hasta Lázaro Cárdenas y las décadas posteriores hasta su desaparición física en 1968, analizado a la luz de la doctrina científica del marxismo-leninismo y la experiencia histórica universal.
Es imposible entender cualquier personalidad fuera de su contexto histórico. Dos vertientes confluyen a forjar a un hombre: la realidad material –socioeconómica- y las ideas que ella produce. Por eso es indispensable comprender la estructura social y sus transformaciones fundamentales, así como las corrientes del pensamiento de mayor influencia, para poder ubicar a un personaje de la historia y entender sus características más sobresalientes.
Gran parte de los años formativos de Vicente Lombardo Toledano corresponden a la etapa del llamado Porfiriato. El mismo hizo la caracterización esencial de este régimen. “La estructura económica y social de México era el latifundismo. El uno por ciento de la población era propietaria del 95 por ciento del territorio nacional. A los pequeños propietarios correspondía el dos por ciento de la propiedad rústica y a los pueblos y comunidades sólo uno por ciento, a pesar de que estos tres sectores de la sociedad constituían el 96 por ciento de la población dedicada a la agricultura”.
Las relaciones de producción en el campo tenían peculiaridades feudales y esclavistas. La servidumbre a que se sometía el campesinado tenía su reflejo en el peonaje. México era una colonia económica de las grandes potencias imperialistas. El 50 por ciento aproximadamente de la riqueza nacional estaba en manos de los monopolios norteamericanos. La clase obrera carecía de todo derecho; el país estaba muy lejos de poseer una legislación especial que rigiera las relaciones obrero-patronales, las cuales en esta época estaban sujetas a las leyes civiles. La huelga estaba considerada como un delito en contra de la libertad de industria y comercio, según lo estipulaba el Código Penal en vigor.
Una férrea dictadura sometía al pueblo mexicano. Cualquier crítica al sistema era castigada con la cárcel o con la muerte. El derecho del pueblo a elegir a sus gobernantes –base fundamental de la democracia formal- estaba ausente del panorama político de México. Había un abismo entre las clases sociales. Como en la época de la Colonia, se daba la diferencia entre los que todo tenían y los que nada poseían.

En consecuencia, tres objetivos fundamentales tenía que perseguir la Revolución Mexicana: la liberación del país respecto del dominio económico del extranjero; la destrucción del latifundismo, con supervivencia feudal-esclavista, y el establecimiento de un régimen democrático. Por tanto, fue una revolución antiimperialista, antifeudal y democrática. Esos fueron los principales aspectos de la realidad material que forjaron la personalidad de Vicente Lombardo Toledano y sus ideales emancipadores. Fue un hombre de la Revolución Mexicana, porque ella le hizo entender el drama de nuestro pueblo, le abrió los horizontes para afiliarse al pueblo trabajador y le mostró la vía que tenía el pueblo de México para seguir avanzando en el sentido de la independencia nacional y el progreso social.
Múltiples facetas abarcan la personalidad excepcional de Lombardo como militante, como teórico y hombre de cultura; de los cuales podríamos destacar por lo menos los siguientes: Se le reconoce su lucha para que el país tuviera una legislación del trabajo de carácter federal. Sus tesis fundamentales al respecto, fueron expuestos en la Convención Obrero-patronal, reunida en noviembre y diciembre de 1928, para discutir un proyecto de Código Federal del Trabajo, presentado por Emilio Portes Gil, Secretario de Gobernación en el Gabinete del Presidente Plutarco Elías Calles.
La CTM bajo su liderazgo, llevó a cabo una obra revolucionaria sin paralelo en la historia de México. Unificó por primera vez a todas las corrientes sindicales del país, contribuyó a la unidad del proletariado de América Latina, aplicó con agilidad y eficacia la línea estratégica y táctica de la alianza de la clase obrera con los campesinos y sectores democráticos, con el fin de conseguir objetivos comunes, ligando siempre las reivindicaciones inmediatas de la clase trabajadora con la batalla por la independencia económica de la nación.
El movimiento obrero mexicano, conducido por Vicente Lombardo Toledano, al llevar al terreno de la práctica la línea de la unidad de las fuerzas democráticas y antiimperialistas, dio impulso a la obra patriótica del Presidente Lázaro Cárdenas, hasta lograr la expropiación de la industria petrolera, objetivo largamente planteado por el dirigente obrero. Su destacado liderazgo en la organización y conducción del proletariado internacional es irrebatible; desde la CTM se convocó en septiembre de 1938 al Congreso Obrero Latinoamericano, del que surgió la central que tuvo mayor influencia en los pueblos del subcontinente: la Confederación de Trabajadores de América Latina –CTAL- que quedó bajo la presidencia del propio Lombardo.
En el ámbito del movimiento obrero mundial, no es menor la aportación del ilustre poblano. Desde la prestigiada tribuna de la CTAL, Lombardo se vinculó con el movimiento obrero de todos los continentes hasta lograr que estos esfuerzos culminaran en los Congresos Obreros de Londres y Paris, en 1945, que crearon la Federación Sindical Mundial, de la que el fundador de la CTM fue vicepresidente hasta 1963
Lombardo puso su vida al servicio de sus ideas e ideales, inspirados en las propias proclamas y rebeldías del pueblo mexicano. Fue militante, fundador y conductor de partidos políticos y funcionario público. Perteneció al Partido Laborista Mexicano, al Partido de la Revolución Mexicana y al Partido Popular, transformado en Partido Popular Socialista en 1960. Como funcionario público, fue Regidor del Ayuntamiento de la Ciudad de México, Oficial Mayor del Gobierno del DF y Gobernador interino de Puebla, entre otros. Como parlamentario participó en las legislaturas XXXI y XXXII del Congreso de la Unión.
Como educador, destacando solo algunos cargos, fue Secretario de la Universidad Popular Mexicana; de la Escuela Nacional Preparatoria en dos ocasiones; de la Preparatoria Nocturna. Fue fundador y director de la Escuela Preparatoria Gabino Barreda y de la Universidad Obrera de México. Maestro de la Escuela Nacional Preparatoria, de la Facultad de Jurisprudencia y de la de Comercio y Administración. Su amplia cultura y preparación como Licenciado en Derecho, Profesor Académico y Doctor en Filosofía, junto a sus ideales y obra escrita llenan alrededor de cien volúmenes, sin haber recopilado su trabajo en el extranjero.
Su ideal socialista jamás se apagó. Pero el socialismo que concebía para nuestro país debía tener los colores del paisaje de México y las vibraciones de la historia del pueblo. Debía estar enraizado en el ser nacional. Debía seguir la vía trazada por la Revolución Mexicana, a través de la democracia nacional y de la democracia del pueblo.
En la XLVI Legislatura del Congreso de la Unión, Vicente Lombardo Toledano ocupó un lugar de honor como Diputado del Partido que él fundó y dirigió hasta su muerte. Algunas de sus iniciativas forman parte de la vida parlamentaria y de las instituciones del país. Otras han sido recogidas en parte. Otra más, como la carrera parlamentaria y la reelección de diputados hoy es una bandera que ha hecho suya la derecha. Y sin duda una de las más importantes, como la relativa a un nuevo capítulo en la Constitución sobre la economía nacional, merecen nuevos estudios desde las actuales perspectivas de la nación. Quienes hoy se esfuerzan por rescatar el patrimonio cultural y la vida democrática de la capital del país con la creación del estado de Anáhuac, encontrarán en las iniciativas del maestro Lombardo Toledano valiosos puntos de vista que pueden ser considerados como fundamentos de un trabajo de largos alcances.
En el acto de homenaje que le rindieron sus amigos, discípulos, compañeros de lucha y personalidades del campo democrático en el Palacio de Bellas Artes, al cumplir sus 70 años de vida, reafirmó sus convicciones y su destino al lado de los trabajadores: “La vida me ha demostrado –expresó- que sin principios firmes derivados de una doctrina filosófica válida acerca del universo, del mundo y del hombre, lo mismo en la dirección del Estado que en la lucha política, no es posible una obra perdurable y fructífera. Transigir con los principios equivale al suicidio, hasta que no queda del que prevarica el recuerdo triste de un vencido que en vano proclama su victoria (…)
“La vida me ha enseñado que la decisión de servir va aparejada a la humildad, porque la vanidad y la soberbia no son sino la máscara que oculta incapacidad o una culpa que no quiere confesarse. La significación de la vida individual depende del grado de cooperación que se haya dado en la teoría y en la práctica a la conquista de las metas que la humanidad persigue…Desde que era estudiante no he sido sino eso: un soldado del ejército invencible de la clase trabajadora que todo lo produce, todo lo descubre y todo lo crea con sus manos y con su cerebro, lo mismo en las minas que en las fábricas, en las escuelas, en los laboratorios de investigación y en el interior de la conciencia. A ese ejército pertenece el porvenir, y si yo luché durante muchos años en el pasado, fue para llegar al presente, y si hoy lucho con pasión es para llegar al futuro. Por lo que a mí toca, seguiré la senda hasta el último momento de mi vida”.
En la noche del 16 de noviembre de 1968, la radio y la televisión transmitieron la noticia de la muerte de Vicente Lombardo Toledano. El PPS envió un mensaje a todos los partidos de la clase obrera del mundo para informarles que su conductor había dejado de existir. El Presidente Díaz Ordáz con todo su gabinete rindió homenaje al ilustre poblano. Lázaro Cárdenas hizo guardia ante el féretro, así como otras personalidades de la política, de la ciencia y la cultura. Una multitud lo acompañó a su última morada, en el panteón Jardín de la Ciudad de México (…desde 1994, en la celebración del Centenario de su Natalicio, sus restos fueron trasladados a la Rotonda de los Hombres Ilustres). Para despedirlo hicieron uso de la palabra: un representante de la Federación Sindical Mundial; el pintor David Alfaro Sequeiros; el representante de la Central Única de Trabajadores de Chile, Salvador Ocampo, y Jorge Cruickshank García, en nombre del Partido Popular Socialista.
En el año de 1994, en la celebración del primer centenario del natalicio del maestro Lombardo, las fuerzas políticas de México le rindieron un merecido homenaje en la Cámara de Diputados, y acordaron instalar su nombre en letras de oro en los muros de honor del Salón de Sesiones, junto a los próceres que forjaron la patria. Ahí está su nombre, vigilante, desde entonces, ocupando el sitial de honor más importante al que puede aspirar un hombre de excepción. Desde ahí, donde se dan las más grandes batallas para decidir el rumbo de México, Vicente Lombardo Toledano seguirá presidiendo las luchas del pueblo mexicano.

sábado, 10 de julio de 2010

NADA QUE FESTEJAR EN RECIENTES ELECCIONES
EL PUEBLO NO PUEDE HACER SUYAS LAS VICTORIAS AJENAS
La democracia de Mercado se agotó. Las fuerzas políticas de la tiranía oligárquica PRI, PAN, PRD y compañía, sufren cada vez más para arrancarle el voto al pueblo en sus afanes de legitimidad. La democracia de mercado y sus instituciones, productos naturales del modelo económico neoliberal, la que publicita los candidatos cual luminarias del espectáculo en vez de la confrontación verdadera de ideologías y programas, ha mostrado en estas elecciones recientes su agotamiento total. El estado general que guarda el país, de zozobra y caos en todos los ámbitos de la vida nacional, cuya responsabilidad absoluta recae en los partidos con registro legal del actual sistema de opresión, no respalda en modo alguno la pretensión de llevar a los electores a las urnas para legitimar su estancia en el poder.
Ante la magnitud del descrédito de los partidos políticos actuales, como de la basura de gobernantes que producen, una de dos cosas tendrá que pasar para recomponer el rumbo del país: se rescata la tesis avanzada sobre la democracia impuesta en el artículo tercero de nuestra Carta Magna por el Constituyente de Querétaro, la que afirma que debemos considerar a la democracia ´´no solamente como una estructura jurídica y un régimen político, sino como un sistema de vida fundado en el constante mejoramiento económico, social y cultural del pueblo´´. O bien, el grado de sojuzgación máxima a la que ya hemos arribado empujará al pueblo a desechar la vía electoral para satisfacer sus viejas querellas y demandas históricas.
Cuando un ciudadano se queda en casa en vez de acudir a cruzar un emblema y depositarlo en la urna es que no ve en esa acción ningún beneficio que involucre su situación material. No se ve representado su interés en ningún partido ni candidato alguno, de ahí resulta el abstencionismo tan alto que se ha registrado en estas elecciones. Una abstención de un jefe de familia obrera significa que no desea respaldar ni legitimar a los que sacrifican su bienestar, pero se reserva el derecho a hacerse justicia por propia mano. Si el salario oficial que le asignan cada año no le alcanza para cubrir las necesidades básicas de la familia, él tendrá que completar el gasto de alguna manera al margen del orden jurídico.
Gobiernos ilegítimos sostenidos por minorías, tal es el resultado del proceso electoral reciente. Chihuahua se posicionó como la entidad con mayor nivel de abstencionismo al registrar un 64.2%, es decir que de cada diez ciudadanos sólo cuatro decidieron emitir su voto. En segundo lugar se posicionó el Estado de Tamaulipas con el 61.3%, seguido de Quintana Roo, con 58.47%ñ Hidalgo con el 52.25% de votantes que no salieron a sufragar.
En Baja California y Chiapas, donde la elección fue para diputados locales y alcaldes, las cifras arrojan que el abstencionismo fue del 68 y del 69 por ciento respectivamente en estas entidades apenas tres de cada diez electores acudió a las urnas, es decir, el 33% de ciudadanos con derecho a votar. En otras entidades se cantó la victoria contra el abstencionismo al haber rebasado apenas el 50% de participación ciudadana en las urnas. Aún con esa baja participación del pueblo los partidos y sus candidatos participantes celebran sus ridículas victorias a rabiar, sin un gramo de vergüenza afirman que ha sido un ´´triunfo de la democracia´´
Ante este panorama tan preocupante reflexionemos sobre una de las principales razones de que el pueblo no quiera ir a votar. De acuerdo con el pensamiento marxista, los partidos se distinguen por los intereses de la clase social a la que sirven, sea la clase trabajadora o la burguesía, por eso existen uno o varios partidos de la burguesía y debe haber un partido de la clase obrera, por lo menos, para que el menú del régimen democrático sea verdaderamente plural. La situación es distinta, sin embargo, en la realidad de nuestros días: ninguno de los que participan con registro del IFE se reconoce como partido de la clase trabajadora, ninguno lo es. De hecho, desde que en 1994 le fuera cancelado su registro al Partido Popular Socialista, en un ultraje salinista a la legalidad, no ha habido partido alguno con autorización jurídica para participar en elecciones que represente los intereses de la clase obrera y el pueblo.
En las recientes elecciones locales que se llevaron a cabo, participaron varios partidos que tienen diferencias, pero éstas no tienen que ver con distintos enfoques ideológicos ni clasistas; tampoco se distinguen por los programas que expresan en sus documentos básicos, ni por sus posturas ante los grandes problemas de México, los relacionados con la economía, la sociedad, la política, ni sobre la visión histórica, el presente ni el porvenir de la nación. Por el contrario, tienen una gran cercanía por la manera en que conciben las cuestiones torales y lo que se proponen hacer al ocupar los puestos de elección por los que compiten. Por eso en la realidad, es natural lo que de acuerdo con la teoría política sería inconcebible, las alianzas entre los que se dicen de izquierda con los que se asumen de derecha. Por ejemplo, es un hecho que no constituye ´´violación de principios´´ -porque ningún partido electoral que se diga de ´´izquierda´´ enarbola hoy tales principios-, ni cabe el símil de mezclar ´´agua con aceite´´, puesto que no tienen tales diferencias; de hecho son muy afines.
Por eso mismo es algo cotidiano otro hecho que teóricamente sería absurdo, el pase de uno a otro partido de sus figuras destacadas: Gabino Cué, quien ganó las elecciones en Oaxaca derrotando al PRI, se formó como funcionario en los gobiernos priístas y allí adquirió lo que para él sean sus ´´principios´´, en el ala reaccionaria del PRI. Por eso es normal que ahora aparezca como miembro de Convergencia, de Dante Delgado, su amigo, mentor y aliado político más cercano. Diódoro Carrasco, hoy prominente panista, también hizo su carrera en el PRI. Rafael Moreno Valle, quien derrotó al tricolor en Puebla, hoy panista, militó asimismo en el PRI. Igual sucede con Mario López Valdez, de Sinaloa.
No es casualidad, por tanto, que en las tres entidades en que el PAN, respaldado por el PRD y otros, emergiera ´´vencedor´´, sus candidatos vengan de la misma matriz y no haya entre ellos un solo panista o militante de otro partido de larga trayectoria, puesto que obedece a un fenómeno ya cotidiano, la transmigración de los políticos profesionales, siempre en busca del mejor botín posible.
Lo cierto es que, como ya se dijo, los partidos que participan en las elecciones hoy en día no se distinguen porque elaboren proyectos diferentes. Sus pleitos con lenguaje rudo se circunscribe a ciertos momentos, sobre todo en los procesos electorales, pero nada tienen que ver con ideas, principios ni proyectos; sólo expresa la aguda lucha que libran por ganar puestos con altísimos sueldos y acceso a riquezas ilícitas con impunidad.
Así, vistas las cosas desde el punto de vista de la clase trabajadora y su ideología, desde el enfoque de los intereses populares, en las elecciones estatales del domingo 4 de julio pasado, quien perdió fue el pueblo, en tanto que los neoliberales y entreguistas ganaron, puesto que consiguieron formalizar otro periodo para seguir por el mismo rumbo, sin cambio real alguno, empobreciendo más a los que ya han explotado hasta el extremo, saqueando a la nación sea con administraciones priístas, panistas o panperredistas, que exactamente lo mismo da.
Con el obsoleto y caduco régimen de partidos la oligarquía nos presenta un callejón sin salida; en el menú de la democracia neoliberal no hay más que de una sola sopa. Frente a ese estado de dominación brutal, el pueblo tiene que organizarse para superar esta tragedia que vive el país, tal vez la sucesión presidencial de 2012 sea la última oportunidad de reivindicar la vía electoral para resolver las añejas contradicciones sociales, políticas y económicas que demanda el pueblo. Por lo pronto, de las recientes elecciones nada hay que festejar, el pueblo no puede hacer suyas las victorias ajenas.