viernes, 11 de mayo de 2012

PRIISMO Y PANISMO ES LO MISMO

PRIISMO Y PANISMO ES LO MISMO Priísmo y panismo, en la actual etapa de la globalización neoliberal, es lo mismo, representan los mismos intereses y desempeñan el mismo papel. Son guardianes y legitimadores de la feroz dictadura económica que somete a nuestro pueblo a vivir cotidianamente en la tragedia. En tiempos electorales, el ciudadano puede observar que los ataques entre el PRI y el PAN se agudizan, haciendo pensar que uno es diferente al otro. Pero tal pleito se reduce a cuestiones de carácter puramente superficiales, la competencia entre ellos es para ver quien desempeña mejor el papel de servidumbre de las clases dominantes. Recordemos que fue a partir de 1882, cuando el capital financiero y monopolista irrumpe en la historia como fuerza única, producto de la revolución científico técnica, imponiendo al mundo sus intereses económicos y políticos a través de gobiernos neoliberales dóciles emanados de las democracias de mercado. Es desde ese tiempo que el poder del dinero puso de rodillas al poder político para que le sirva de manera exclusiva. De ese modo, la mayoría de los partidos políticos, los regímenes y sus instituciones quedan relegados al papel de guardianes del capital. La pirámide dominante en cualquier país donde impere el modelo neoliberal, como es el caso nuestro, en la cúspide se haya instalado el capital financiero y monopolista con el carácter de clase directora; justo enseguida, en orden descendente, se encuentran los medios masivos de comunicación desarrollando el papel de aparato ideológico de la clase directora instalada encima de ellos. Y debajo de éstos, ocupando el tercer sitio en orden descendente, se encuentran los regímenes políticos y todas sus instituciones, entre ellos los partidos políticos burgueses, quienes se encargan de servir tanto al capital financiero y monopolista como a su aparato ideológico, creando las leyes que justifiquen el saqueo, el despojo y el predominio de ambos. Un caso ilustrador fue la llamada Ley Televisa, hecha a modo por el Poder Legislativo para que esa empresa satisfaga sus apetitos económicos y como pago a su labor desinformativa. De 1982 a la fecha, con la llegada de la globalización neoliberal, el PRI fue despojado de su ideología original para imponerle en su lugar la descarnada teoría del mercado, lo que lo llevó a hermanarse ideológicamente con el partido tradicional de la derecha, el PAN. En este hecho, el poderío del capital adquirió para la defensa de sus intereses al otro partido dominante en México, el PRI. Al contar con la propiedad de los dos partidos dominantes de la vida política se instaló en nuestro país la dictadura económica que hoy conocemos como prianismo. Esa es la razón por la cual El PRI y el PAN son dos partidos idénticos en cuanto a su propuesta programática. Es del conocimiento público su coincidencia en sus desvelos por privatizar Pemex, una añeja demanda del capital privado, coinciden en la carrera por la privatización de la seguridad social y en la proyectada reforma laboral, añejas demandas también del sector patronal, y en todas las contrarreformas constitucionales que han desdibujado al país.(Art. 3, 27, 82,130, etc.). De 1982 a la fecha, nuestro país ha sufrido un declarado gobierno de coalición prianista, de la crisis que vive el país ambos son responsables. El pueblo debe esclarecer su conciencia y no dejarse engañar. Ninguno de los dos partidos representa el cambio sistémico que ha hundido al país, porque representan lo mismo, el patrón de ellos no es el pueblo sino el gran capital, el que les demanda continuar con el mismo modelo en su beneficio. Como cuentan con dos franquicias y una ya no les sirve, hoy proponen el regreso del PRI con una nueva cara, si el pueblo no quiere más PAN aquí tienen al del ´´copete´´, el caso es que el pueblo caiga en el engaño de que va darse un cambio. Todos los priístas que militan de buena fe deben hacer un llamado a su conciencia y salvar su responsabilidad, deben deslindarse desde ahora si quieren de verdad salvar a la patria de un sexenio más de tragedias. El ejemplo ya lo puso Manuel Bartlett Díaz al sumarse a las filas de López Obrador. Todos los priístas conscientes están llamados a contribuir con el cambio verdadero. San Luis R.C.,Sonora, 11 de mayo de 2012